9 agosto, 2018
Estrategias que han resultado efectivas para mejorar la seguridad ciudadana en diferentes lugares del mundo. Las carencias y posibilidades de nuestro país.
Mejorar la coordinación entre las distintas policías municipales; fomentar la cooperación entre policía y sociedad; rediseñar el espacio urbano; aprovechar la tecnología de geolocalización; y aumentar las penas son algunas de las medidas que han servido para fortalecer la prevención, la vigilancia y la acción contra el delito en varias ciudades del mundo.
La Argentina sufre de una tasa de robos por encima de la media de América latina (aunque su tasa de homicidios es relativamente baja comparada con el promedio regional). Según la última Encuesta de Victimización del Indec de 2017, un 44% de los encuestados dejó de salir de noche por razones de seguridad y casi el 60% de los padres no permite que sus hijos salgan solos.
Los expertos en seguridad consideran que en el país faltan políticas públicas multiagenciales, es decir, que promuevan espacios de cooperación entre distintas áreas estatales -como educación, trabajo y desarrollo social- para prevenir el delito. Además, es necesario disolver la percepción de impunidad que surge de la falta de condenas por parte de la Justicia. También, urge combatir la concentración de delitos en las ciudades más pobladas del país. El 73% de los robos y homicidios ocurre en 5 de las 24 jurisdicciones: las provincias de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, Mendoza y la ciudad de Buenos Aires.
Algunas estrategias que han sido exitosas alrededor del mundo son:
- Apelar a una disuasión focalizada, a través de programas que involucren instituciones estatales y comunitarias, para cambiar el comportamiento criminal y prevenir conductas delictivas desde la primera infancia.
- Fundar cuerpos de policías estatales con responsabilidad sobre zonas urbanas, o policías intermunicipales o metropolitanas. Adoptar, también, modelos de policía comunitaria.
- Crear, recuperar y mantener espacios públicos, que abarquen desde las calles y el alumbrado hasta los parques, bancos y centros comunitarios.
- Mejorar los sistemas de transporte público y desincentivar el uso del auto para aumentar el número de peatones.
- Utilizar la tecnología de geolocalización del delito para concentrar los esfuerzos de prevención en zonas de alta densidad delictiva (hot spots).
- Restringir la compra y el acceso a las armas.
A fines de junio, el BID aprobó un préstamo de 25 millones de dólares para ayudar a la Argentina a implementar un programa federal de seguridad que busca reducir la tasa de robos y homicidios dolosos en zonas con altos niveles de delincuencia:
- Primero, se mejorará la calidad y el análisis de la información delictual mediante equipamiento, servicios de software, asistencia técnica y capacitación.
- Segundo, se profundizará la efectividad policial a través del fortalecimiento del recientemente creado Instituto Conjunto de Conducción Estratégica (ICCE). El ICCE permitirá contar con fuerzas federales y provinciales entrenadas en el trabajo conjunto y coordinado para la prevención, disuasión, e investigación criminal.
- Finalmente, se llevarán adelante planes municipales de seguridad enfocados en reducir robos y homicidios utilizando intervenciones basadas en evidencia de impacto. Asimismo, se robustecerá el Programa Barrios Seguros para reafirmar la presencia del Estado y la integración social en barrios con altas tasas de homicidios y conflictividad social.
Fuentes consultadas:
- https://blogs.iadb.org/sinmiedos/2017/07/10/gestion-capacitacion-datos-las-claves-mejorar-la-seguridad-ciudadana-argentina/
- https://www.lanacion.com.ar/2141579-de-capitales-del-delito-a-ciudades-modelo-claves-para-reducir-la-violencia-urbana
- https://imco.org.mx/seguridad/que-hace-segura-una-ciudad/
- https://colombiadigital.net/actualidad/articulos-informativos/item/8627-que-hace-a-una-ciudad-mas-inteligente-y-mas-segura.html