Un robo es, por definición, la sustracción de pertenencias mediante el uso de la violencia. Esto puede suceder con o sin la ayuda de un arma. No obstante, en ambos casos los pasos a seguir son muy similares.

Cómo actuar en un robo a mano armada

Si alguien intenta atracarnos a mano armada, debemos:

• Para empezar, mantener la calma. Pensar en nuestra seguridad. Aunque es normal sentirse frustrado y vulnerable en ese momento, no debemos permitir que las emociones nos dominen. La seguridad es mucho más importante que cualquier objeto de valor que nos roben. Nada material vale la pena como para correr el riesgo de salir herido o perder la vida.
• Evitar focalizar la atención en el arma, a modo de que consigamos que el ladrón tampoco le preste tanta atención.
• No oponer resistencia. Esto es fundamental, ya que tenemos las de perder y es mejor salir ilesos, por lo que se recomienda no enfrentarse nunca al ladrón.
• Darle lo que pida rápidamente, ya que queremos salir del peligro cuanto antes.
• Cuando huya de la escena, nunca perseguir al ladrón tras el asalto, ya que podría atacarnos. Correr en dirección contraria y buscar refugio en un lugar seguro. Pedir ayuda inmediatamente a transeúntes para que avisen a la policía.
• Intentar retener en la memoria la descripción del agresor, de la forma más clara posible, ya que luego podremos informar a la Policía estos detalles para que sea posible su identificación.

¿Y si no es un robo a mano armada?

Lo veamos claramente o no, debemos suponer que el ladrón siempre estará armado. Y aunque nuestro asaltante no posea un arma o un objeto amenazante, no hay que olvidar que puede seguir siendo violento. Puede tener escondida una navaja o usar cualquier herramienta como arma. En esos casos, es importante actuar de manera calmada y colaborar para que se lleve lo que quiera y se vaya cuanto antes.  Lo más importante es protegerse a uno mismo y darle todo lo que pidan.

¿Y si el robo se produce dentro de casa?

Puede darse el caso de que el asalto suceda en tu vivienda. Si es así, te recomendamos:

• Si escuchás que están intentando entrar, lo primero que debés hacer es llamar al 911 o dar el alerta a la central de alarmas (en caso de que tengas) o a algún vecino.
• Si aún no han entrado, hacer ruido y encender las luces para que sepan que detectaste su presencia
• Si entran, ocultarte o encerrarte en alguna habitación con llave.
• Si te encuentran, no ofrecer resistencia. La regla básica es que nunca, bajo ningún concepto, te enfrentes al delincuente.
• Mantené la calma, dentro de lo posible. La manera más efectiva es respirar hondo y nunca levantar la voz.
• Adoptá un lenguaje corporal sumiso, con las manos a la vista y un poco levantadas. No mires directamente a los ojos o de manera desafiante al delincuente.

Siguiendo estos consejos, aumentarán las probabilidades de que el episodio termine pronto y que el susto sea menor.