29 octubre, 2018
Puertas blindadas, puertas acorazadas y puertas de seguridad: se diferencian por su fabricación, sus componentes y la seguridad que ofrecen.
La seguridad en el hogar comienza por la puerta exterior. Todos los expertos coinciden en que la seguridad física es el pilar en la secuencia de protección; la alarma actúa como complemento. El sistema de alarma detecta y avisa de una intrusión, mientras que la puerta retarda e impide la entrada. De todas formas, no todas las puertas son iguales. Puerta blindada, puerta acorazada, puerta de seguridad… Muchas personas creen erróneamente que se trata de tres términos parecidos para designar el mismo producto, pero no es así.
Puertas blindadas
Sus componentes, ya sean placas u hojas, están hechos de materiales como madera y metal. Además, están recubiertas de una chapa de metal de dos mm de espesor que forma las dos caras de la puerta.
Se caracterizan por tener cerraduras con un cilindro que impide su desinstalación y que soporta hasta 500 kg, dependiendo del modelo. Los expertos recomiendan instalar un doble escudo de seguridad.
Su desventaja radica en que la placa de madera puede destruirse con algún material pesado, lo cual las hace más vulnerables.
Puertas acorazadas
Como actualmente se encuentran en auge las puertas blindadas, las acorazadas pasaron a utilizarse para proteger lugares que guardan objetos de gran valor, como obras de arte o muebles. Se las suele ver en
palacios de gobierno y museos. A su vez, suelen tener códigos de seguridad, lo cual reduce la posibilidad de quebrantamiento. También, sus cerraduras de disco y sus bisagras alimentan la sensación de seguridad.
Como cuentan con tubos de acero especiales, resultan más resistentes que las puertas blindadas, pero muchas se pueden abrir fácilmente usando tan solo un destornillador y un martillo, ya que el cilindro y el escudo protector no son de gran calidad. Otra desventaja es su precio elevado.
Puertas de seguridad
Son las más utilizadas en domicilios particulares. Pueden usarse para el exterior y para el interior de una casa. Se destacan por el mecanismo de cierre, conformado por una estructura en el marco. Esta cerradura es una de las más seguras del mercado. Las cerraduras cuentan con bombines de seguridad que impiden su extracción.
El éxito de las puertas de seguridad está en los pestillos redondeados y rectangulares. En cuanto se cierra la puerta, la cerradura se activa en el sitio frontal, superior, inferior y lateral. Su precio está por debajo que el de la puerta blindada o acorazada.