27 noviembre, 2018

Saber actuar ante una situación de robo

Aunque prevenir siempre es mejor que curar; si el siniestro ocurre, actuar con serenidad puede minimizar el sufrimiento y propiciar un desenlace más favorable.

Resistirse ante un robo es un gran error. Las estadísticas señalan que los forcejeos y los intentos por evitar el delito derivan en los desenlaces más violentos. Por el contrario, un estado de calma puede transformar la escena a nuestro favor. Aunque resulta imposible anticipar cómo reaccionaremos, tener presente ciertas estrategias contribuye a lograr cierto control de una situación de riesgo.


1) Permanecer calmado

Buscá signos de pánico que puedas mostrar y tratá de calmarlos.

1.Repetite frases positivas

Resulta útil repetir internamente frases alentadoras que te recuerden mantenerte relajado, y confiar en que todo estará bien y en que sobrevivirás a esta situación. “Soy valiente y esto ya va a pasar”.

2.Recurrí a alguna técnica de relajación.

  • Tensá un músculo por unos segundos y después relajalo. Hacelo con cada grupo muscular del cuerpo.
  • Visualizá un lugar relajante y seguro en tu mente al que puedas escapar. Tratá de usar todos tus sentidos cuando imagines este lugar.
  • Concentrate directamente en sentir cómo baja tu ritmo cardíaco, cómo se reduce tu respiración y se relaja tu cuerpo.

3.Transformá las órdenes del ladrón en frases positivas.

El ladrón puede gritarte las indicaciones y esto puede causar que sientas pánico. Sin embargo, dentro de tu cabeza, tenés el timón. Reformulá internamente esas órdenes para suavizarlas. Por ejemplo:

    • “¡No te muevas!” se puede volver a formular como “quieto”.
    • “¡No mires!” se puede convertir en “mira algo más”.

4.La calma te mantiene a salvo.

Por lo general, un ladrón solo busca dinero. Recordá que cuanto más relajado y dócil estés, es menos probable que te dañen durante el robo. Por eso, no intentes escapar, no grites, no hagas movimientos bruscos.

2) Adoptar las medidas correctas

1.Cooperá.

Una buena forma de trasmitir que no sos una amenaza ni un obstáculo para el ladrón es permanecer calmado y cooperar.

    • Escuchá atentamente las órdenes y trabajá efectivamente para cumplirlas.
    • No te ofrezcas como voluntario ni ayudes activamente al ladrón. Solo hacé lo que te pida.
    • Informá al ladrón sobre cualquier paso que debas tomar y explicá por qué lo hacés.
    • Pedile permiso antes de hacer cualquier movimiento que pueda parecer riesgoso, como meter las manos en un cajón o en tus bolsillos para buscar, por ejemplo, la llave de la caja.

2.Pedí aclaraciones de la forma correcta.

Si no entendés lo que te pide el ladrón, pedí aclaraciones con cautela, ya que como probablemente él esté alterado, puede reaccionar mal.

    • Preguntá de forma directa y breve. Decir algo como: “Disculpá, no comprendo”.
    • Si no escuchás bien algo, tratá de repreguntar lo que creíste haber escuchado. Por ejemplo: “¿Querés, entonces, que busque la llave para abrir esta caja?”.

3.Hablá directamente y solo cuando te lo pidan.

    • Las respuestas largas pueden aumentar el estrés y el pánico. Elegí respuestas cortas y positivas, sin explicar más de lo que te piden.
    • Siempre respondé con honestidad.

4.No opongas resistencia.

Pelear solo suscitará mayor violencia. Movete con lentitud; los movimientos rápidos pueden parecer amenazadores para el ladrón.

5.Registrá tantos detalles como puedas.

Llevar notas mentales de los detalles sobre el ladrón y sobre el robo puede ayudar tanto a que preserves la serenidad en el momento, manteniéndote concentrado, como a que puedas brindarle datos útiles a los policías después.

  • Recordá cómo lucía el ladrón: su tamaño, peso, ropa u otros aspectos que lo distingan.
  • Acordate de todo lo que hizo y en qué orden.

De todas formas, no te pongas en peligro para lograr esta tarea. Solo dale vistazos rápidos si notás que es posible.

En cuanto se vaya el ladrón:

  • Cerrá todas las puertas y las ventanas.
  • Llamá a la policía antes que a cualquier otra persona.
  • Fijate si están todos bien y solicitá asistencia médica si fuera necesario.
  • No toques nada que pueda servir para obtener indicios sobre los autores.
  • No dejes entrar a nadie al lugar del delito.
  • Mantené libre la línea telefónica hasta que llegue la policía.
  • Colaborá con la policía y transmitile todo lo que recuerdes.

Es normal sentir pánico tras un hecho de este tipo, porque se descarga la ansiedad y los nervios que se estaban conteniendo para preservar la calma. Nunca hay que subestimar los efectos de haber vivido un robo. A cada persona le afecta de forma diferente; hay quienes necesitan hacer terapia para superar esta crisis.

Ningún bien material es más importante que la vida. Por eso, evitar supuestos actos heroicos y actuar con prudencia es fundamental.

Fuentes:

http://laarcom.com/consejos-para-actuar-ante-un-robo

https://www.publimetro.com.mx/mx/noticias/2015/10/08/10-consejos-reaccionar-asalto-evitar-dano-mayor.html

http://ajuntament.barcelona.cat/guardiaurbana/es/consells_fer.html

https://es.wikihow.com/permanecer-calmado-durante-un-robo