Conocer quiénes son los vecinos
En primer lugar, es importante conocer a los vecinos más cercanos. Al saber sus nombres, sus horarios habituales y rutinas costará menos detectar movimientos extraños en el edificio o vecindario. También es aconsejable pedirle el teléfono a alguna persona del edificio o del barrio con la que haya cierta afinidad. Por lo general, la gente está dispuesta a solidarizarse y, al vivir tan cerca, algunos vecinos pueden ser los primeros en acudir en caso de requerir auxilio.

Desconfiar de vendedores o instaladores desconocidos
Si no se ha concertado una cita con alguien para que arregle algo en casa o algún service en concreto, nunca se debe abrirles la puerta.

Correspondencia
Algo muy sencillo, pero que da muy buen resultado, es poner varios nombres en el buzón del edificio. Esta medida no afectará a la recepción normal del correo y ayudará a despistar a cualquier ladrón que esté buscando domicilios donde sólo haya un ocupante. También se recomienda usar sólo las iniciales del nombre junto al apellido. Así nadie sabrá si quien vive en esa casa es una mujer o un hombre. Esto es importante para evitar posibles delitos de violencia de género contra las mujeres.

Mantener una comunicación regular con familiares y amigos
Esta es una buena estrategia de seguridad para quienes viven solos. Si se suele llamar o a escribir un mensaje a alguna persona cercana todos los días a la misma hora, el día que no lo reciban, intentarán contactarse para saber que todo está bien. Se trata de una medida eficaz, no sólo para casos de robos o intrusos en la casa, sino por si sucedió algún accidente doméstico. Para el caso de robos, utilizar una contraseña que se escriba en el caso de una emergencia puede mantenernos seguros.

Agendar los números útiles
Es importante tener en los contactos del celular los números de la comisaría más cercana, de los bomberos y de emergencias médicas, para encontrarlos rápidamente en un momento de nerviosismo o emergencia.

Adoptar medidas de seguridad
Es importante analizar si se puede acceder fácilmente al interior del hogar por las ventanas o los balcones. Siempre es aconsejable colocar rejas en todas las ventanas. De igual modo, instalar puertas de seguridad también es recomendable. Las puertas de seguridad son una herramienta que suele disuadir a los potenciales ladrones. Cuanto más sea acceder, antes desistirán de entrar en un domicilio y pasarán de largo. Además, si la puerta tiene mirilla angular es más segura ya que se podrá ver con claridad quién está llamando a la puerta.

Aplicaciones de botón anti-pánico
La tecnología puede ser una gran aliada para personas que vivan solas y se encuentren en una situación de peligro. Existen varias aplicaciones mobile gratuitas son muy sencillas de utilizar y funcionan como botón anti-pánico. Sólo basta con pulsar el botón rojo en la pantalla y la aplicación enviará, a una lista de contactos previamente configurada, un mensaje que indicará la ubicación de la persona y que se encuentra en situación de emergencia.

Como se pudo ver, con sólo tomar ciertas precauciones se puede vivir solo puede ser mucho más seguro.